Una ballena de quince metros de largo y tres toneladas de peso que apareció esta tarde varada en una playa de la localidad malagueña de Marbella ha muerto, ha informado a Efe el delegado provincial de Medio Ambiente, Ignacio Trillo. Este ejemplar de rorcual común, el de mayor envergadura que ha llegado a la costa de Málaga, será retirado de la orilla de la playa de La Petunia, donde se han congregado unas 3.000 personas, después de que se le practique la autopsia.
Desde la 15.15 horas miembros del Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREMA) de Málaga trataban, con la ayuda de varias embarcaciones, de introducir a este mamífero en el fondo del mar para evitar que pudiera asfixiarse. Esta ballena, que llegó a la orilla por sus propios medios y presentaba heridas leves como consecuencia del roce con las piedras, tiene su hábitat natural en las aguas del Mar de Alborán.
Personalmente me apenan estos sucesos. Como alguno de vosotros sabréis, en el mar de alborán estuve embarcado colaborando en un proyecto de conservación y censo de los cetáceos en el mediterráneo.
El barco, Tooftewag, un Ketch noruego, declarado monumento histórico.
Estuve embarcado de ocho a diez días.
Arriba y abajo, calderones en el mediterráneo.
Aquí, otro avistamiento espectacular de calderones y delfines.
Todos los archivos fotográficos y el sonido de los calderones, así como la información de los cetáceos la he obtenido de Alnitak, el proyecto Earthwatch y buscando en Google "Tooftewag".
Ricardo y Ana estarán encantados de que visitéis sus páginas.