Tú y Félix, Félix y Tú, sembrasteis en mi, por aquel entonces un niño, la pasión por la aventura y el amor por la naturaleza, un regalo impagable que siempre os agradeceré.
Recuerdo las mañanas de domingo en el Museo de Ciencias Naturales, buscando bichos en Navacerrada o cangrejos, caracolas o quisquillas entre las piedras del puerto deportivo de Salou, intentando emular a dos de mis grandes héroes.
Colección de minerales, pájaros disecados, un mirlo, una lechuza y una primilla, siempre llenos de polvo en las estanterías de mi cuarto y que, aún, conservo en la memoria. La enciclopedia de Félix "La Aventura de la Vida", sus diapositivas, tus viajes por iberoamérica que he intentado, sin éxito, repetir a mi manera.
Descansa, pero no mucho. Nunca dejes de viajar y de contar.
Gracias para siempre, Miguel de la Cuadra-Salcedo.
¡Buen viaje!
Recuerdo las mañanas de domingo en el Museo de Ciencias Naturales, buscando bichos en Navacerrada o cangrejos, caracolas o quisquillas entre las piedras del puerto deportivo de Salou, intentando emular a dos de mis grandes héroes.
Colección de minerales, pájaros disecados, un mirlo, una lechuza y una primilla, siempre llenos de polvo en las estanterías de mi cuarto y que, aún, conservo en la memoria. La enciclopedia de Félix "La Aventura de la Vida", sus diapositivas, tus viajes por iberoamérica que he intentado, sin éxito, repetir a mi manera.
Descansa, pero no mucho. Nunca dejes de viajar y de contar.
Gracias para siempre, Miguel de la Cuadra-Salcedo.
¡Buen viaje!