En mi expedición al Toubkal, Matías e Ibrahim, los guías, me indicaron que debería cambiar las puntas de los bastones. ¿Cambiar las puntas?, pensé yo. Ni idea.
Con razón, y es que mis bastones ya se han hecho el Toubkal, el Mulhacén en varias ocasiones, el Almanzor en dos ocasiones, Torreón dos veces, Tiñosa, Bonales dos veces, Mágina, Miramundos, Maroma, Chullo, Torrecilla, Aljibe, Terril... y no sé cuántas otras montañas. Espero que muchas más.
Aquí los lleváis. A ver cuánto me duran.